Lámparas de mesa: iluminación para cada rincón

Sobre la mesita de noche, el escritorio o la mesa de la sala, estas hermosas piezas de iluminación son ejemplo de belleza y practicidad. Nunca como ahora la creatividad de los diseñadores había dado tantos productos para satisfacer gustos exigentes. Con estas lámparas, vestir ese rincón especial será tarea difícil, porque no sabrás cuál elegir. Todas tienen algo en común: calidad y originalidad. Todas son singulares.

1968, de Faro Barcelona

Artesanalmente elaborada en la región ibérica, conjuga tradición y modernidad. El aire retro de su diseño evoca a los aparatos de televisión vigentes en los sesenta. La luminaria se distingue por sus líneas limpias y por la difusión de la luz a través de la pantalla de lino. La madera con la que está fabricada se trabaja en Valencia, y las piezas se ensamblan a mano por carpinteros expertos en los talleres de Torelló, España.

El logo está grabado con láser y los soportes son impresos en 3D en las instalaciones de Faro. El resultado es una lámpara que parece portátil, pero se asienta a la perfección sobre una mesa. Cuenta con fuente de luz led cálida de alta eficiencia y regulable. Cada lámpara es única e irrepetible, lo que le da mayor realce como un producto de autor y de diseño extraordinario, perfecto para iluminar un espacio residencial. Dimensiones: 36.5 cm de largo, 23 cm de ancho y 42 de alto.

28, de Bocci

 

Los diferentes componentes de esta lámpara de sobremesa incluyen un sistema integral de atenuación luminosa de 360º alojado dentro de un elegante cilindro de latón. El cordón de tela es semirígido y permite moldearse para adecuarse a la superficie donde se coloque, ya sea sobre una mesa o sobre un muro. Es tal la versatilidad de la colección 28, a la que pertenece esta pieza, que permite ambas posiciones, ya que cuenta con una muesca bajo la base de metal que lo facilita.

La grandiosidad del diseño de cada lámpara Bocci, como es bien sabido, radica en la majestuosa manufactura de cada pieza, ya sea soplado de vidrio o trabajo manual del material que se utilice para su creación. Cada lámpara es única por este extraordinario proceso que tanto reconocimiento público y premios de diseño le han dado a la marca canadiense. Este modelo está disponible en 28 colores. 

Circa Table, de Pablo Designs

Al trabajar esta lámpara, los diseñadores de Pablo Studio pretendían crear un producto revolucionario, pero familiar. Y no solo diseñaron una nueva lámpara, sino que dieron vida a un nuevo arquetipo de iluminación interior, que oscila entre la lámpara utilitaria y la tradicional con pantalla.

La característica que define a Circa Table es un panel plano con iluminación led que se mueve fluidamente sobre su eje principal. Esta movilidad asume un número infinito de posiciones mientras funciona como una lámpara auxiliar que proporciona luz de ambiente equilibrada. También es compatible con dispositivos móviles del usuario mediante la integración de un puerto de carga USB. Tiene interruptor táctil que permite tres niveles de intensidad de luz.

Tatu, de Santa & Cole

Con tecnología lumínica renovada, la Tatu sigue siendo, en esencia, la misma, pero con nuevos bríos y una silueta que no podría pasar de moda jamás. Firmada por el laureado diseñador André Ricard, en 1972, la Tatu es un objeto que añade valor al estilo de vida de las personas que la eligen para su entorno.

El cuerpo mecánico de la Tatu es como un flexo compacto concebido en tres secciones, que pueden rotar independientemente para adecuar su uso sobre la mesita de noche o, incluso, en un estante. La versión reciente ha mejorado, pues incorpora tecnología led fácilmente manejable para graduar la intensidad lumínica. Además, integra una lente convergente desplazable que amplía o reduce la apertura focal de una fuente menos calurosa, pero más longeva.

Gweilo, de Parachilna

 

Para formarla, unas láminas acrílicas se moldean manualmente al calor de un horno, lo que hace que las piezas se asemejen, pero ninguna sea igual. Gran paradoja: el plástico, sinónimo de mass production, en Parachilna se transforma en un material para elaborar lámparas únicas.

Este modelo representa la unión de una filosofía que comparten el diseñador Alex Josephson, líder del estudio de arquitectura Partisans y autor del modelo, y Parachila: “nunca digas nunca”. Así, tomaron el riesgo de recurrir a un material tan subestimado para darle un giro y convertirlo en un producto original. La Gweilo incluye una tira de luz que se encastra en el perfil de aluminio extorsionado anodizado y dorado. Incluye dimer situado en el cable eléctrico. 

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