Envuelta en un vibrante acabado naranja, Serpente de Martinelli Luce vuelve para celebrar 60 años. Se presenta con la misma fuerza visionaria que la convirtió en uno de los iconos más reconocibles de su tiempo. De una época cuando el diseño comenzó a establecer límites y el naranja era símbolo de esperanza y transformación.
Revolución estilística
Diseñada por Elio Martinelli, la lámpara de mesa Serpente fue la máxima expresión de una revolución estilística. Aquella que fusiona tecnología, funcionalidad, geometría y dinamismo. Ahora, la pieza regresa revitalizada en ese tono que amplió horizontes: naranja vibrante.
Libertad creativa
“El naranja evoca entusiasmo y libertad creativa. El mismo espíritu que animó a mi padre y que aún guía nuestro trabajo. Es parte de nuestra historia como familia y como negocio. Nos identifica plenamente”, explicó Emiliana Martinelli, presidenta de la empresa. Este color celebra su espíritu atemporal y rinde homenaje a la creatividad que originó un nuevo lenguaje de diseño. Uno que combina forma, función y libertad de expresión.
Fluida y armoniosa
Serpente de Martinelli Luce se integra por una base redonda y una pantalla conectadas por un eje serpenteante. Este brazo giratorio y su difusor rotatorio evocan los movimientos fluidos y armoniosos de la serpiente. Además, la base de metal contrasta con el difusor/pantalla semiesférico de metacrilato con acabado opalino blanco. En versión de mesa y de piso emite luz suave y difusa que no genera deslumbramiento.
Movimiento continuo
A 60 años de su creación Serpente sigue vigente. Mantiene su aire moderno y cautivante complemento con su funcionalidad y dinamismo al servicio de la vida cotidiana. Esta pieza de Martinelli Luce invita a experimentar la luz con el mismo entusiasmo y libertad que animaron los años sesenta. Luz difusa, líneas fluidas, movimiento continuo la caracterizan. Encarna la idea de un diseño vivo en constante evolución. Lo bueno regresa y brilla.
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