Para llevar a donde quieras, estas pequeñas piezas de iluminación son perfectas para espacios compactos. Las lámparas de mesa portátiles Easy Peasy de Lodes llaman la atención por su original diseño que semeja un divertido muñequito y hasta un frasco de perfume. Son recargables, funcionales, esbeltas y minimalistas.
Diversidad táctil
En solitario, son perfectas para añadir un toque acogedor a cualquier ambiente doméstico. En grupos, aportan carácter a cualquier espacio de hospitalidad, tanto a hoteles como a restaurantes. La diversidad táctil de Easy Peasy de Lodes sorprende desde el primer momento. Metal y vidrio conviven en armónico contraste, así como las superficies brillantes y transparentes combinan para dar lugar a una pieza plena de detalles.
Cuerpo y pomo
Cada lámpara de mesa Easy Peasy de Lodes se compone de dos elementos: cuerpo y pomo. El pomo redondeado permite encender y apagar la lámpara, así como regular la intensidad y el calor de la luz gracias a la tecnología dim-to-warm. Debido a esta característica es posible recrear una atmósfera familiar, íntima, cálida y acogedora en el momento deseado. En el pomo conviven color y el control de las funciones tecnológicas.
Toma micro USB
Por otra parte, el cuerpo de la pieza de iluminación se asienta sobre una base metálica que resguarda la fuente luminosa led. También incluye un difusor blanco en metacrilato abrazado por una campana de vidrio que filtra la luz. Disponible en cuatro combinaciones de colores, la lámpara incluye en la base del cuerpo una toma micro USB para recargar la batería.
Cuatro acabados
Flamingo (rosa y gris), Lagoon (turquesa y miel), Kelp (verde y miel) y Chesnut (gris pardo y gris) son los acabados disponibles para la Easy Peasy. Diseñada por Luca Nichetto, apenas alcanza los 23.3 cm de alto por 12.1 cm de diámetro en la parte más ancha.