La histórica Aella de Leucos recibió una actualización. Ahora, la colección formada por lámparas de mesa y suspensión fue revisada por los diseñadores para incluir tecnología led en su elaboración. De este modo, la luminaria proporciona un toque de elegancia sinuosa y atemporal, a la vez que permite un óptimo consumo de energía eléctrica.
Vórtice luminoso
Diseñada por Renato Toso y Noti Masari, Aella de Leucos está disponible en dos tamaños para la versión de mesa y de suspensión. Además, la estructura que la sostiene se ofrece en tres acabados. Por otra parte, Aella se caracteriza por su diseño sofisticado y mínimo, formada por dos elementos sobresalientes: base y difusor. Elaborada en vidrio siguiendo la tradicional técnica veneciana de vidrio soplado, Aella forma un hermoso cono de vidrio. Cuando se enciende, un vórtice de luz parece flotar en su interior, a la vez que genera patrones sinuosos y reflejos armónicos.
Dos tamaños y tres acabados
La versión de mesa de gran formato (54 cm de diámetro) tiene base de metal lacado. Esta se ofrece en acabado cromo brillante, blanco cálido y latón vintage con el difusor transparente. En cambio, el difusor gris humo tiene base de acabado bronce mate. Por otro lado, el modelo mini de mesa mide 30 cm de diámetro. Su base se presenta en blanco cálido y cromo brillante con difusor transparente y base bronce brillante con difusor humo gris. Además, los difusores de las versiones de suspensión mantienen las mismas dimensiones que las de mesa.
Técnicas tradicionales
Aella es una de las luminarias icónicas de Leucos. Esta pieza de iluminación diseñada en 1968 proporciona luz directa y brillante. Además, representa la intención de la marca de ofrecer un punto de vista fresco y contemporáneo a las técnicas tradicionales artesanales de vidrio soplado a mano.
Ciclón de luz
La colección Aella de Leucos fue nombrada en honor a una guerrera amazona de la mitología griega. Con el personaje, Aella encanta con su diseño limpio y sofisticado. El significado de dicho término puede traducirse como tornado. Por otro lado, las curvas suaves de vidrio soplado a mano de la luminaria se originan en un solo punto que se arremolina para atrapar un ciclón de luz armónico y efímero.