Gracia y sencillez son las características esenciales de Fleur, una lámpara portátil de Foscarini con una doble función. Por un lado, el propósito principal de iluminar el entorno; por otro, la inesperada tarea de contener agua para una flor recién cortada. De este modo, iluminación y funcionalidad se combinan para decorar cualquier rincón con un detalle de refinamiento excepcional.
Contenedor y difusor
Diseñada por Rodolfo Dordoni, Fleur de Foscarini es inalámbrica y portátil, por lo que puede llevarse a cualquier rincón. La gracia de su diseño radica en el soporte transparente para el agua, mientras que el difusor lumínico ofrece una presencia contundente. El ejercicio de estilo que el diseñador propone reside en el hábil manejo de las proporciones entre contenedor y difusor.
Porcelana fina
La idea de que Fleur de Foscarini fuese una presencia discreta en cualquier superficie obligó a considerar cuidadosamente los acabados y las dimensiones de la luminaria. El cuerpo de la lámpara consiste en un cilindro de Pirex abierto en la parte superior. La abertura es el punto de ingreso para la flor. El emisor de luz se ha trabajado en porcelana fina que está disponible en acabados suaves.
Miniaturización excepcional
Encendida, la luz de Fleur de Foscarini enfatiza el perfil del contenedor de vidrio y se proyecta mediante un pequeño circuito led. Para conseguir este, se trabajó en una excepcional miniaturización de los componentes desarrollados por la marca. El resultado fue una pieza de iluminación de líneas limpias, capaz de combinar con el interiorismo de espacios residenciales privados, tanto como de entornos comerciales y de hospitalidad. Además, la facilidad de carga mediante cable USB y la duración de la batería favorecen aún más su mantenimiento y portabilidad.
Dordoni
Nacido en Milán y graduado como arquitecto del Politécnico de aquella ciudad, Rodolfo Dordoni ha diseñado para la mayoría de las marcas más importantes en los sectores del mueble y la iluminación.
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